Red velvet con buttermilk, un ligero toque de cacao y relleno de crema de queso y nata para una decoración espectacular. Perfecta para un San valentín por todo lo alto.
Tiempo de preparación20 minutosmin
Tiempo de cocción1 horah
Tiempo de decoración30 minutosmin
Tiempo total1 horah50 minutosmin
Plato: Postre
Cocina: Americana
Keyword: buttermilk, crema de queso, red velvet, tartas
Raciones: 10personas
Autor: Teresa
Ingredientes
Ingredientes para el bizcocho
3udhuevos
200grazúcar
190grharina
30grcacao en polvosin azúcar
1cdtabicarbonato
1cdtalevadura en polvo
140mlaceite de semilla o de girasol
140mlbuttermilko leche on una cucharada de vinagre
1cdavinagre
1cdacolorante rojo intenso en gel
Ingredientes para el relleno
400grcrema de queso para untar
300mlnata para montar
200grazúcar en polvo
100grmantequilla sin salmuy blanda y a temperatura ambiente
Elaboración paso a paso
Preparación del bizcocho
Precalienta el horno a 160ºC y forra con mantequilla y papel de horno un molde de 20cm de diámetro.
Monta los huevos con el azúcar hasta obtener un compuesto espumoso y blanquecino.
Añade el colorante y sigue montando hasta que esté bien incorporado.
Tamiza los ingredientes secos y añádelos en tres veces a la mezcla de huevos con la ayuda de una espátula. Incorpora con movimientos envolventes para no desmontar mucho la masa.
Añade el aceite a filo.
A continuación añade el buttermilk y el vinagre. La masa aumentará ligeramente de tamaño por la reacción entre el ácido y el bicarbonato/levadura en polvo. Te queda poco tiempo para volcar la masa sobre el molde y hornear. No dejes reposar la masa en absoluto porque se desmontará más a cada minuto que pase.
Hornea a 160ºC durante 45-60 minutos. Deja enfriar por completo una vez lo saques del horno.
Preparación del relleno
Bate bien con unas varillas la mantequilla a temperatura ambiente hasta que esté cremosa.
Añade el queso crema a la mantequilla y bate bien hasta que estén incorporados.
Añade el azúcar en polvo y sigue mezclando.
Monta ligeramente la nata para montar en un cuenco a parte. No debe quedar muy montada para que sea fácil de incorporar a la crema de queso, pero no debe estar tampoco líquida o el restultado será muy líquido también.
Incorpora poco a poco la nata semi montada sobre la crema de queso. Te debe quedar una crema bien montada que mantenga su forma. Si la quieres blanca completamente puedes añadir unas gotitas de colorante blanco.
Montaje y decoración.
Corta ligeramente la capa de arriba del bizcocho para obtener una base lisa y sin color. Usa un cuchillo de sierra pequeño y asegúrate de pasarlo también por todo el borde para eliminar el color dorado y las deformaciones que se hayan creado durante el horneado. Queremos obtener un bizcocho con rojo intenso por todo el alrededor. Además, estos restos los usaremos después para decorar el borde de la tarta.
Corta el bizcocho en tantas capas iguales como te apetezca.
Coloca la primera capa sobre una base para tartas o sobre un plato. Puedes usar una cucharadita del relleno debajo para evitar que la tarta se mueva mientras la decoras.
Divide el relleno según las capas que tengas para asegurarte que todas las capas de relleno tienen el mismo grosor. Deja una buena parte de relleno a parte para usar durante la decoración.
Una vez rellenas todas las capas, ayúdate de una espátula o de un cuchillo liso para cubrir toda la tarta con la crema. Debe quedar completamente blanco. Si se ven un poco las capas por alrededor no importa porque lo vamos a curbrir con las migas que han sobrado anteriormente.
Desmiga bien los restos de los cortes anteriores del bizcocho. Puedes ayudarte de un rallador para obtener una miga más fina. Presiona las migas con tus manos alrededor de la tarta. Tiene que haber bastante crema para que la miga se quede pegada por completo.
Usando una boquilla 1M de Wilto y una manga pastelera, decora la parte superior de la tarta con forma de rosas. Para asegurarte de que distribuyes bien las rosas, empieza haciendo una rosa arriba, otra abajo y una a cada lado. Para finalizar, completa con una rosa en medio de cada cuarto de tarta y repite la misma técnica en el centro de la tarta.
Notas
Si quieres que te cunda más, haz esta receta en una bandeja grande rectangular con toda la crema por encima. Obtendrás muchas porciones de Red Velvet.
También puedes usar esta receta para hacer cupcakes.
Puedes omitir la nata por completo si quieres un sabor a queso más intenso.
Puedes reducir la cantidad de azúcar en el relleno sin problema.
Asegúrate de usar un colorante intenso, los colorantes líquidos que solemos encontrar en el supermercado no suelen ser suficientemente intensos y la red velvet te quedará rosa.
Si tu colorante no aporta mucho color, no añadas más o el sabor del bizcocho cambiará.