El honeycomb candy es más conocido en los países anglosajones. Se trata simplemente de unir caramelo y bicarbonato para crear las burbujas que se ven en su interior. El resultado es un snack muy dulce con una textura crujiente que desaparece rápidamente en la boca.
Se trata de una receta muy fácil y divertida de hacer pero es también muy versátil. Lo podemos comer tal cuál, pero os recomiendo cubrirlo de chocolate negro. De esta forma, el amargo del chocolate compensa el dulzor del caramelo para crear una perfecta combinación. En Inglaterra y en Estados Unidos se puede encontrar en supermercados y tiendas en forma de barritas con chocolate y en forma de caramelos. El honeycomb candy es también muy usado para decorar tartas, para incluir como crujiente en cremas e incluso para hacer helados. Os muestro algunos ejemplos:
Antes de hacer esta receta hay que tener en cuenta algunas cosas
200 gr. azúcar
10 gr. bicarbonato
50 gr. miel
66 gr. agua
aroma (opcional): vainilla, ralladura de limón, aromas líquidos etc.
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